«Un método que te ayuda a incorporar buenos hábitos psicofísicos a través de la reeducación motriz»

La Técnica Alexander te ayuda a incorporar hábitos saludables y vivir con menos esfuerzo.
Mejora tu bienestar con un método placentero que te libera de las tensiones innecesarias.

Aprende a «dejar de hacer» lo que te genera tensión.

La tensión es uno de los principales factores de dolor, desgaste energético, cansancio, mal uso del cuerpo, lesiones, compensación e insatisfacción.
La Técnica Alexander ayuda a descubrir hábitos nocivos de uso de nuestro nivel psicofísico, enseñando cómo “dejar de hacer” lo que no “es” para ir en la dirección deseada.
El objetivo es redireccionar las fuerzas funcionales para lograr un uso muscular eficaz con menor esfuerzo.
Aplicándola en una actividad específica como puede ser practicar yoga, cantar, danzar, tocar un instrumento, correr, nadar, andar a caballo; trabajar en el computador o conducir un auto; el alumno aprende a perfeccionar el uso de su propio cuerpo y a transformar una dificultad en una posibilidad, así como a potenciar sus virtudes.
La práctica cotidiana de la Técnica Alexander ayuda a eliminar tensiones y dolores musculares y trabaja en la prevención de los mismos, contribuyendo a una buena calidad de vida y salud psicofísica general.
La mejoría comienza desde la primera sesión, se pueden tratar lesiones y no hay ninguna contraindicación.
La Técnica Alexander se ha practicado por más de 100 años en países de todo el mundo, especialmente en Inglaterra y EEUU, formando parte de los programas de Universidades de Artes y Salud.
Una sola sesión de la Técnica Alexander es un paso adelante hacia la mejora de los hábitos psicofísicos, ya que el cerebro aprende y no vuelve atrás. La práctica regular favorece la adquisición de hábitos favorables del uso del “sí mismo”, que conducen a una mejoría duradera.
La Técnica Alexander te puede servir:
En la cotidianidad
Si sientes tensiones musculares, dolor de cabeza, de espalda, dolor articular. Si tienes limitación en el movimiento, rigidez, baja capacidad respiratoria, problemas con la voz.
Música, voz y actuación
Si necesitas mejorar la proyección de tu voz y tu expresión corporal para cantar o hablar en público. Si tu cuerpo se resiente al sostener el instrumento musical, u otros aspectos que te impiden desarrollar tu nivel técnico.
Teletrabajo
Si pasas mucho tiempo sentado con el ordenador o haciendo acciones muy repetitivas que provocan exceso de tensión muscular o dolor de cabeza recurrente o tendinitis.
Danza y deporte
Si sientes dificultad para mantener ciertas posiciones, dolores recurrentes, limitaciones en el movimiento, exceso de esfuerzo o exceso de tensión.Agenda tu turno
Participa de una práctica constructiva:
- La práctica de la Técnica Alexander educa mediante un pensamiento constructivo
permitiendo que el propio cuerpo construya por sí mismo el hábito saludable. Las manos del profesor sirven como estímulo para que el cerebro detecte lo que no está pudiendo detectar: compensaciones, exceso de tensión muscular, patologías de columna, problemas neurológicos, lesiones u otras interferencias. - Las clases requieren de un trabajo individual entre el profesor y el alumno que dura de 20 a 45 minutos.
Se puede también trabajar en pequeños grupos con una dinámica interactiva entre los alumnos y el profesor. - Pueden practicarla personas de cualquier edad y condición.
Incluso niños y gestantes, no hay contraindicaciones de ningún tipo, ni necesidad de experiencia previa.

La metodología de la Técnica Alexander:

- La metodología consiste en un trabajo especializado donde el profesor observa al alumno realizar actividades cotidianas como hablar, caminar, sentarse y levantarse de una silla.
- Después utiliza sus manos para guíar y orientar suavemente al alumno a deshacer tensiones, fomentando el uso de los reflejos naturales del organismo.
- Poco a poco se van creando en el alumno condiciones para responder a los problemas del cotidiano con menos estrés y mayor libertad para elegir como hacerlo.
¿Cuántas clases se precisan?
Se recomienda tener una frecuencia de una a dos veces por semana y no hay un número predefinido de clases.
Teniendo en cuenta que los músculos y tendones precisan un mínimo de tres meses para modificar un hábito de uso, el STAT (The Society of Teachers of the Alexander Technique) recomienda de 20 a 30 clases para que los nuevos patrones de uso del cuerpo se instalen y funcionen debidamente en el día a día. Lo que se podría traducir en un total mínimo de seis meses, para que se deje de usar un mal hábito y se incorpore uno nuevo.
En una investigación realizada en Inglaterra y publicada por The British Medical Journal, en agosto de 2008, quedó comprobado que 6 clases de Técnica Alexander promueven un significante e importante beneficio a largo plazo para portadores de dolor crónico de espalda.
El Dr. Paul Little, quien condujo dicha investigación en Southampton University, dijo:
”La Técnica Alexander es un paso significativo al frente en el tratamiento a largo plazo del dolor de espalda”

Preguntas frecuentes:
¿Hay algún límite de edad para mejorar los hábitos corporales?
No creo que exista.
¿Qué diferencia hay entre la fisioterapia y la Técnica Alexander?
Abordan el cuerpo de distinta manera. La Técnica Alexander considera el cuerpo como una unidad integrada entre psique y físico, mientras que la fisioterapia se concentra solo en la parte física.
¿La Técnica Alexander realmente funciona?
Es una técnica tan eficaz que mejorarás aunque no quieras. Desde la primera sesión el cuerpo va incorporando poco a poco los aprendizajes y no vuelve atrás.
¿Es beneficioso combinar la Técnica Alexander con algún deporte?
Puede serlo como no. Es importante que hables esto con tu profesor para que él te indique que es más conveniente en tu caso particular.
¿Existe alguna contraindicación para la práctica de la Técnica Alexander?
No existe ninguna contraindicación. Se puede practicar con cualquier condición corporal sin riesgo de lesiones.